MONTERIA CORDOBA-.
En esta ciudad Capital del Departamento de Córdoba, se encuentran muchos personajes que se dedican a cualquier oficio que con sus talentos han aprendido a subsisitir para sobre vivir con tal de prestar un buen trabajo y de cualquier manera desvarar a cualquier ciudadano que ocurre donde ellos, por decir, relojero, mecánico empírico, sastre, modistas y en otras actividades, como en el caso de Libardo M. Hernández V., que por más de 50 años los ha dedicado a la elaboración y reparación de toda clase de anteojos, hasta cuenta con respuestos general ahí en su pequeño laboratorio, ubicado en la carrera 4 Número 29 – 30 que en sus inicio ahí compartía el localito con el gran fotografo Nacor Zuluaga, uno de los veteranos de esta profesión y debido a sus años de vida dedicados a este oficio se retira y le deja el local a Libardo quien con muchos esfuerzos y dedicación a su oficio ha seguido sosteniendo este local que lo tienen como arriendo y de veras lo ha sabido llevar adelante como uno de los pocos Laboratorios Ópticos que aún existen en pleno centro de Montería… Es así que Libardo vivió como vecino al frente del edificio de la extinta Lotería de Córdoba, donde también funcionó por muchos años la Secretaría de Salud Departamental, diagonalmente la extinta Casa Liberal donde despachaba el doctor Libardo López y así otras viviendas de la vieja Montería, hoy existen nuevos edificios, pero ahí permanece este personaje al cual el personal de Revista EXPECTATIVA 42 Años, le ha dedicado esta crónica con mucho orgullo, cariño a Libardo M. Hernández V. … que entre otras cosas es un gran aficionado al Béisbol…al Porro interpretado por las bandas de músicos, sus platos favoritos son: Sancocho de gallina criolla, una viuda de carne salada esa que aún vende en la calle 32 entre carreras 7 y 8 don Walter Gómez y otra viuda que es la de pescao sinuano acompañado con un vaso de guarapo de panela ciolla y más ná.
Escribió: ROBERTO CASTILLA ARROYO – Revista EXPECTATIVA 42 AÑOS
Fotos: Revista EXPECTATIVA 42 Años.