Escribió: ROBERTO CASTILLA ARROYO

Exclusivo para Revista EXPECTATIVA 41 Años.

El primer piano que llegó a Sincelejo, de la prestigiosa firma Zeitter & Winkelmann Braunschweig, en la segunda década del siglo XX, fue importado de Alemania por Don Juan Chadid Raide como regalo a su hija mayor Luisana. El piano fue desembarcado en Tolú y se transportó en hombros y en mula a Sincelejo.

Doña Luisana fue una gran pianista y concertista de la región. Su enseñanza musical se orientó a través del estudio y conocimientos básicos de solfeo y lectura de las partituras y también por el desarrollo auditivo musical que ostentaba con fácil comprensión e interpretación de las melodías. Su principal mentora en el campo musical fue su prima Isabel Chadid de Mebarak, abuela de Shakira.

Acostumbraba a deleitar el ambiente de su hogar con la interpretación de piezas clásicas de Beethoven, Chopin Mozart, Verdi, Bach y otros compositores de reconocimiento mundial.

Igualmente, dada su amplia experiencia musical, tocaba en el piano otros diferentes géneros musicales de Europa y América que sonaban en ese entonces, y naturalmente, los ritmos populares de la Región Caribe, como porros, cumbias, fandangos, vallenatos y otras canciones que estaban de moda en el folclor nacional colombiano.

Se destacaron como sus canciones favoritas: mis flores negras con letra y música del poeta Julio Flórez, la gata golosa, el Danubio azul, la paloma, oh sole mío, el pasodoble Silverio Pérez, la rondalla, el limonar, camino verde, el tango la cumparsita, plegaria para una virgen y otras melodías de la época. Se le recuerda además porque en las misas solemnes y otras ceremonias religiosas, era quién tocaba el órgano ubicado en el coro alto de la hoy Catedral San Francisco de Asis de la capital de Sucre, mostrando siempre un espíritu alegre y servicial.

En ciertos actos estuvo acompañada por la soprano antioqueña Marina González. Algunas de las partituras que ella compuso se encuentran en la Casa de la Cultura de Sincelejo como parte del patrimonio musical y cultural de Sucre. Su primo Fortunato Chadid fue el autor del himno de Sucre. Como profesora de piano, desarrolló un interesante método educativo practico para despertar no solo las aptitudes musicales de sus alumnas sino también para reforzar la atención, la concentración e incrementar la memoria y la creatividad.

Un importante grupo de distinguidas señoritas de la época, recibieron sus enseñanzas para tocar el piano y entre las cuales se destacan: Lucy Urzola Capella, Myriam Otero Dajud, Celina Otero Dajud, Mirna Luz Gazabón, Nuris Montes, Cecilia Dajer, Norma Dajer, Nancy Samur Santamaría, Lucy Hernández Manotas, Rosario Sierra, Lucy Chadid Anaya, Maira Guerra, dos de los hermanos Benítez, quienes luego hicieron parte del conjunto “los corraleros de Majagual”, agrupación que ha dirigido con mucho éxito Alfredo Gutiérrez.

Doña Luisana también se dedicó a contribuir en obras sociales a través de distintas organizaciones existentes, principalmente en Sincelejo y el Municipio de San Pedro. Se casó con Don Antonio Dajer Bohórquez y tuvieron un hijo, el Exministro Gustavo Dajer Chadid, quien además fue Gobernador del Departamento de Sucre en dos ocasiones, Senador y Presidente del Congreso de la República, quién hoy conserva dicho piano, en muy buenas condiciones, en su lugar de residencia, después de más de un siglo de existencia. Por causa de un infarto, el 26 de agosto de 1962 falleció Doña Luisana Chadid de Dajer en la Ciudad de Barranquilla, tocando el piano ante un grupo familiar, en la casa de Don Moisés Jattin, padre de la también pianista Doña Martha Jattin (esposa del ex alcalde de Sincelejo Enrique Fadul Bitar), y luego fue trasladada a Sincelejo, su tierra natal, donde reposan sus restos en el Parque Cementerio Jardines de la Esperanza.

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