Información para los lectores de Revista EXPECTATIVA 43 Años

Montería, 5 de mayo de 2014.- El 5 de mayo de cada año, la Organización Mundial de la Salud (OMS), a través de su campaña “Salva vidas: Limpia tus manos», busca generar conciencia sobre la importancia de la higiene de manos en el cuidado de la salud y unir a las personas en apoyo a la mejora de la higiene de las manos en todo el mundo.

Durante la pandemia por COVID 19, el lavado de manos fue una de las medidas de prevención en las que que más se hizo énfasis junto con el uso del tapabocas. Y es que la higiene de manos es fundamental para prevenir la propagación de patógenos peligrosos durante la atención de salud, pues los microbios pueden ingresar al cuerpo a través de los ojos, la nariz y la boca, y el lavado adecuado de manos ayuda a detener esta propagación.

Desde la Secretaría de Desarrollo de la Salud de la Gobernación de Córdoba, se reitera el llamado al personal médico y asistencial a no bajar la guardia con la higiene de manos, una medida que hace parte de los protocolos de asepsia que se implementan en las clínicas, hospitales y en general, en los sitios donde se prestan servicios de salud, desde consultas hasta procedimientos de gran envergadura.

Por eso, debemos convertir el lavado de manos con agua y jabón en un hábito, pues al hacerlo incidimos en la reducción de las muertes por diarrea a casi la mitad y las muertes por infecciones respiratorias en una cuarta parte, según datos de la OMS. Esta medida se puede aplicar no solo en el ámbito hospitalario sino en los hogares.

A continuación enumeramos los 5 momentos clave para la higiene de manos, según las recomendaciones de la OMS:

  1. Antes del contacto con el paciente o cualquier superficie que esté en contacto con el paciente, asegúrate de lavar tus manos. Esto ayuda a prevenir la transmisión de microorganismos.
  1. Antes de realizar procedimientos como la inserción de catéteres intravenosos o la manipulación de heridas, asegúrate de lavar tus manos. Esto reduce el riesgo de infecciones.
  1. Después de estar en contacto con fluidos corporales (como sangre, saliva o secreciones), es crucial lavar tus manos. Esto protege tanto al profesional de la salud como al paciente.
  1. Después de tocar al paciente o superficies cercanas a él, asegúrate de lavar tus manos. Esto evita la propagación de microbios a otros pacientes o áreas.
  1. Después de tocar superficies o entornos cercanos al paciente (como las barandillas de la cama o las mesas), es importante lavar tus manos. Esto previene la contaminación cruzada.

Recuerda que la higiene de manos es una medida simple pero poderosa para prevenir infecciones y proteger la salud de todos. ¡Lavémonos las manos regularmente!

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